Tu brisa, hermoso susurro de calma;
viene ligera abanicando a los juncos.
Dando vida a las aguas alumbradas,
desparramando un trino de sueños

Abro mi puerta a esa ideal luna –tú-.
Llegas inmensa, iluminada, amable.
Te adaptas entre mis espacios,
Llueves como una única agua de lago.

Es noche profunda, todo se ignora:
hombres, cosas, espacios y geometrías
Solo mi cuerpo te advierte, vive…
Recoge tu oleaje nocturno entre mis arenas.

Tu luna cae y atravesándome en mi,
se deja colgar como un intrépido sauce.
Pasos agitados entre el mundo envuelto;
etéreos como los ojos del corazón huido.

Suena la luz, se dispersa la neblina.
En esa noche resplandeciente pactamos:
Rosas de silencio para ser florecientes.
Vigor de realidades para ser aromas.

Olas en movimiento suspendido por silencios.
Deslizándonos dentro del manantial del amor.
Noche extendida de refugio de amantes.
Calida niebla de sosiegos…,vida.

Dirección, cabeza, sonidos de milagros.
Silencio, cuerpo de cantos sutiles.
Milagro imaginado que apunta al alba.
Tu en mi torbellino, yo en el ahogo.

Como hermosos títeres del bello funeral;
Amantes del tiempo para bogar entre lágrimas.
Para ser apuntes de delirios temblorosos.
Los dos, soles nocturnos de firmes sosiegos

Me baña tú luna húmeda.
Son ojos resplandecientes.
Hilos de dirección exacta
Nacer al día sin deriva. Gracias. (luzyabsenta)